
Yo quiero sembrar contigo,
por los rincones de tu alma,
y levantar en el mar,
castillos blancos sobre el agua.
De tu boca una voz sale,
un te quiero, dicho con la mirada,
en un lienzo pintar, el llanto
de tu mirada.
Beso tras beso yo te di,
en tu cuerpo de espuma,
se enciende la fiebre que abraza,
dentro de mi.
Quiero esos ojos tiernos abiertos,
a la ilusión, espinas convertidas
en flores, cuando se abre las puertas,
de un corazón.
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