Si pudiera subir hasta mi boca
el corazón, para poder hablarte,
la verdad de mi amor podría contarte,
este anhelo febril, y mi ansia loca.
Pero no, el corazón queda en el pecho
y mis labios no aciertan a moverse,
es tal mi turbación sólo con verte,
que no puedo decirte lo que siento.
Quizás si me miraras dulcemente
mi corazón latiera con sosiego,
y tal vez con mirarme solamente
me atreviera a decirte que te quiero,
podría así, sucederme de repente,
poseer el amor que tanto espero.
Diario de un Estoico II. La posibilidad de lo imposible. Semana 33
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*A/15.L*
*Eran los estoicos personas de lógica. Usaban la razón para dominar su
mente y controlar su vida.*Sabían en cada situación lo que sí y lo que ...
Hace 8 horas
2 comentarios:
Maika, que bello poema y bella entrada,Benedettí el maestro genial.
Besitos
MAIKA ILUSIÓN:
Hola medianoche, muchas gracias por tu comentario, bello, hay el gran maestro como no benedetti genial, maestro de lo maestro besos, muy agradecida por tu comentario maika ilusión.
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